¿Cómo lograr el trabajo en red?

Una organización es una compleja red de interacciones entre las personas que la conforman, por esta razón, la organización continuamente emerge en la medida en que ellas interactúan para lograr sus propósitos.

CONSEJOS PARA EL TRABAJO EN RED

1. Es preciso hacerse consciente de que la organización es en realidad una red

La organización actual más que un grupo de personas o de equipos aislados  es una red de interacciones entre personas, equipos y áreas para lograr sus objetivos. Una persona aislada no puede lograr los objetivos.

2. Todo logro de objetivos es liderado por alguien, pero movilizado por su red

La red de interacción laboral (La denomino RIL) es tan efectiva como el logro de los propósitos conjuntos alcanzados por el esfuerzo común de los miembros de dicha red.  Alguien lidera, pero varias personas están involucradas en acciones que posibilitan el logro. La RIL es el tejido de interacciones que son necesarias y que son movilizadas por las acciones de una persona en conexión con otras para el logro de los objetivos encargados.

Equipo

3. Analice su RIL

Recuerde que son personas que en un momento pueden aportar al logro de los objetivos de su rol. Identifique a las personas de su red, dentro  o fuera de la organización, que juegan un papel en el  logro de sus objetivos.  Comprenda la distribución de las personas que conforman su red empezando por su equipo directo y luego viendo otros equipos y áreas. Describa la relación con cada una en términos de compromiso, duración, historia común y los logros compartidos, que generan  cierta  regulación de la relación y un grado de conexión de cercanía. Finalmente, observe la diversidad cultural, étnica, profesional, de genero, edad, nivel socio-económico y nivel de jerarquía de las personas que conforman su red.

  1. Gestione su RIL

Para gestionar la red es necesario: A. hacer consciencia de que nuestro trabajo está soportado en las “relaciones clave”, que construimos con nuestro equipo directo y con otros equipos que resultan determinantes para el logro de los objetivos. B. Comprender nuestra red. La conexión con los demás, incluso a veces con personas inusitadas, pueden ser muy importantes en el logro conjunto de los objetivos, personales, los del equipo y a la larga los organizacionales. C. Mantener vivas estas relaciones. Esta gestión de la puede terminar no sólo en la movilización de obstáculos, sino también en la posibilidad de anticipar ciertos retos y proyectar las relaciones para lograr sinergia.

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