La situación actual reviste grandes desafíos para los líderes, pues está matizada por altos niveles de incertidumbre, volatilidad en los mercados, una economía mundial compleja, escenarios cargados de ambigüedad para actuar y responder de forma rápida y eficiente, cambios permanentes, tecnología avanzando a pasos agigantados que exigen actualización y movimiento ágiles, gran presión por los resultados, entre otras exigencias.
La experiencia en el trabajo con un gran número de líderes en la región, nos indica que es importante seguir estas recomendaciones:
-Mantener la calma, hacer pausas, reflexionar y lograr un buen nivel de autocontrol
-Enfocar la atención en el ámbito de la solución, no en el problema, esto implica analizar cómo estamos pensando, tomar consciencia de las creencias, paradigmas y verdades con las que actuamos, atreverse a cuestionarlas y dejar solo aquellas que impulsan al crecimiento.
-Escuchar a la gente, estar conectado con su lado humano y recoger el impacto emocional que están experimentando en estos momentos.
-Mantener la cohesión en los equipos de trabajo. Buscar que la gente esté conectada y trabaje de forma colaborativa.
-Velar por que exista una moral alta en las personas que estimule su positivismo, su capacidad para sobreponerse a las situaciones difíciles y la seguridad y convicción en un futuro mejor para todos.
-Transmitir un mensaje que invite a la proactividad, brinde seguridad, fortalezca la valentía y la esperanza; que la gente sepa qué hacer, hacia dónde dirigirse, cómo transitar el camino y salvar los obstáculos con confianza para avanzar y mucha fe.
-Demostrar comprensión, tolerancia, empatía y compasión por cada persona.
-Construir conjuntamente con los equipos de trabajo objetivos y rutas a corto plazo
-Asegurar una comunicación efectiva, abierta y honesta.
-Empoderar, revisar roles, metas y prioridades en el equipo que permita una mayor eficiencia y bienestar en las personas.
-Realizar actividades para re-energizar al equipo, bajar los niveles de tensión, brindar reconocimiento y agradecer por la contribución que hace cada persona.
Hágase permanentemente preguntas, como, por ejemplo: ¿Qué no estamos viendo? ¿Para qué estamos listos? Qué sería lo peor que podría pasar si… ¿Cuál es el significado de esto que está ocurriendo?, ¿Cómo la forma en que pienso como líder está ayudando a mantener la situación?
Recuerde: Esto también pasará.
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